En los sueños, el armario ropero es un símbolo de nuestras posesiones íntimas, de nuestro bagaje cultural. Por ello, soñar con un armario desordenado es un aviso de que debemos reordenar y actualizar nuestros conocimientos.
Si está vacío, indica que en estos momentos no estamos capacitados para asumir el nuevo empleo o situación que nos apetece, y que ante todo es necesario la adquisición de nuevos conocimientos.
Cuando el armario lo soñamos lleno y bien ordenado, lo que debemos contemplar es su contenido, ya que si éste es de mala calidad o en mal estado, lo que nos dice el sueño es que debemos actualizar nuestros conocimientos y deshacernos de todos aquellos prejuicios y falsos conceptos que son un impedimento para nuestro progreso.
En cambio, cuando contiene telas de buena calidad y en buen estado, si todo es ropa blanca, hay que temer una enfermedad o alguna herida, mientras que si está lleno de ropa diversamente coloreada, nos anuncia que sacaremos un buen provecho de nuestro bagaje cultural, o lo que es lo mismo, que llegaremos a conseguir riqueza y bienestar.