Ante todo debemos distinguir los sueños de nacimiento de los parto y de los de recién nacidos.
En los sueños de parto lo que se presencia es el acto físico del nacimiento, es decir, el PARTO, y serán interpretado en dicho epígrafe.
Los sueños de recién nacidos de hecho ya son un sueño de NIÑOS, y así los interpretamos en su momento.
Pero en los sueños de nacimiento, que son los que aquí nos interesan, lo que presenciamos es una fiesta, un acontecimiento, la noticia del parto, pero sin presenciar el acto físico del parto; es como en el matrimonio, que presenciamos la ceremonia, la fiesta del matrimonio, pero no el acto de su consumación física.
Por lo tanto, el nacimiento de un niño siempre es una fiesta, a ejemplo de lo que representa la fiesta de Navidad, o nacimiento de Cristo, que a pesar de su trágico destino es, ha sido y será, una fiesta para los cristianos.
Los sueños de nacimiento no se refieren al nacimiento de alguna persona, sólo afirman que algo ha nacido o nacerá próximamente, que algo ha aparecido en nuestro horizonte vital; puede ser una relación, una amistad, un amor, un nuevo hogar, un negocio; o quizás algo íntimo y personal (un nuevo ideal, una nueva creencia, el germen de un invento o de un libro, un nuevo estado de conciencia...) que sólo nosotros podemos conocer.
Que uno ve: será llamado a tomar una decisión grave.
Que uno es: grandes ventajas que traerá una decisión valiente.
Uno mismo: llegará a la meta.
Ver nadar a otros: en un negocio, hay que ponerse de acuerdo con terceros.
Como en todos los sueños en que intervienen los JUEGOS de azar, jugar a los naipes siempre presagia pérdidas y decepciones, casi siempre debidas a que nos dejamos arrastrar por los acontecimientos, sin poner por nuestra parte toda la fuerza de voluntad que deberíamos para intentar controlarlos.
Ver una: ganas de viajar.
Coger una: la felicidad está mal asegurada.
Comer una: un cambio será benéfico.
Símbolo sexual.
Que uno ve: exhortación a cuidar más de la salud.
Que uno tiene: se refiere en primer término a la salud.
Que uno come: desde el punto de vista de la salud, un periodo bueno o mejor en perspectiva.
El narciso crece en lugares muy húmedos y florece en primavera, lo que lo relaciona con el simbolismo del agua y de los ritmos estacionarios y, consecuentemente, con la fecundidad.
Pero además se plantan narcisos sobre la tumbas, simbolizando el entumecimiento de una muerte que no es más que un sueño del que hay que despertar.
De todo ello ya podemos desprender que el simbolismo del narciso se centra en los conceptos de muerte, renacimiento, sentimientos y fecundidad.
Pero también simboliza la caída de Narciso en las aguas en las que se estaba mirando complacido, lo que ha dado lugar a las interpretaciones de vanidad, egocentrismo y amor hacia sí mismo.
No obstante, la interpretación simbólica del mito del Narciso puede ser más simple y profunda a la vez: el agua es un espejo, pero un espejo abierto a las profundidades del yo, y lo que traiciona el reflejo del yo que se ve en él es una tendencia a la idealización, que si bien en su aspecto inferior puede ser un defecto, en su aspecto más espiritual puede ser extremadamente positivo, pues puede conducir a la elevación estética y a sublimarse en un ideal.
Como en todos los sueños de tan complejo simbolismo, la interpretación siempre se ve ayudada por las emociones que lo acompañan y las circunstancias personales del soñador, que en el fondo son las más determinantes.
Cuestión de poder, de fuerza; en la mayoría de los casos interpretación sexual. A veces, advertencia contra una enfermedad del encéfalo e irritaciones.
Particularmente grande o anormal, que uno ve: equivale a una advertencia de no mezclarse en los asuntos de otros.
Que uno se ve a sí mismo: no dejarse desconectar en la ejecución de un plan o de un trabajo por las habladurías de terceros.
Nariz tapada: obstáculos o dificultades en un asunto.
Que uno ve sangrar: pérdida de fortuna.
Hallarse en un barco en peligro: caerá en una situación peligrosa.
Hundirse con el barco: tendrá una caída grave por su propia falta, o se desplomará.
Ser náufrago y salvado: perderá todos sus bienes.
Ser náufrago y ahogarse: personas compasivas le preservarán de una profunda angustia.
Salvar a náufragos: será preservado como por milagro de una desgracia que se producirá.
Barco en la bruma: un peligro amenaza.
Consultar también
Lucha interior de lo claro contra lo oscuro.
Que uno ve: advertencia contra las exageraciones.
Verse uno como negro: exhortación a ser sincero y franco en un asunto determinado.
Con un negro amigo: se reconciliará con un adversario.
Con el que uno peles: estará expuesto a graves ataques.
El nenúfar, íntimamente ligado al agua y al tierra, a la vegetación y al mundo subterráneo, además de ser la expresión de la belleza, lo es también de fuerzas telúricas y pasiones ardientes, por lo que en sueños augur problemas pasionales (de amor, de odio, de venganza o de celos) casi siempre por el desbordar de dichas pasiones.
La nevera es una de las formas en que los sueños nos muestran cómo es la economía del hogar.
Por ello, si la soñamos bien provista y ordenada nos revela la buena economía y previsión de la dueña del hogar; mientras que si está vacía lo será de su falta de previsión y economía.
Si la nevera se hunde o está destrozada es que las finanzas familiares se hallan en grave peligro.
Concentración en una modesta construcción del porvenir.
Vacío, que uno ve: una relación amorosa deseada no se realizará, o se producirá una disensión en el hogar, o un miembro de la familia se irá del hogar para seguir su propio camino.
Que uno ve con huevos o con crías: fundará o desarrollará un matrimonio feliz o la familia aumentará.
Que uno destruye: perderá por su culpa su casa y su país; si se trata del nido de un animal peligroso, escapará conscientemente o sin saberlo, a un gran peligro.
Que uno ve destruido: tristeza, pena de amor o preocupación en el hogar.
De un animal peligroso, que uno ve: tendrá que ver con personas malvadas.
Que uno ve: felicidad en el hogar.
Que uno ve construir: hará vida en común; en las personas casadas, embellecimiento de su casa.
Con huevos: un bebé o incluso mellizos, en las personas de más edad, nietos.
Con crías: los hijos serán una fuente de alegría.
Ver a una golondrina alimentar a sus crías: revela el deseo de tener hijos o nietos.
Que uno vacía o destruye significa que uno mismo causará la pérdida de su felicidad y de su paz.
Que uno ve vaciar o destruir a terceros: la felicidad y la paz en el hogar están amenazados por terceros.
Impedir a alguien vaciarlo o destruirlo: personas que le quieren bien le ayudarán en la necesidad.
Que uno ve: felicidad en el hogar.
Con huevos: muchos hijos.
Con crías: mucho trabajo y esfuerzo, pero retribuidos con alegría.
Que uno destruye o vacía: dará un paso en falso que causará un grave daño.
Falta de claridad respecto al porvenir y al camino a seguir.
Que uno ve delante de sí: en un asunto o negocio chocará con dificultades imprevistas que sin embargo podrán ser superadas si reflexiona.
En la que no se puede reconocer ya nada alrededor: se le encomendará una tarea o un asunto que sólo podrá sacar adelante gracias a su sentimiento y a su buen sentido.
Cuestión de potencia sexual; la naturaleza duerme o está muerta, frío y frialdad; la estación es el símbolo de la edad que uno ha alcanzado en la vida.
Que uno ve caer (o ráfaga de nieve): noticias que abren la perspectiva de un destino mejor en el futuro.
Ver un paisaje cubierto de nieve: bienestar en el hogar.
Tormenta de nieve: tiempos difíciles, pero que uno logrará superar.
Bola de nieve o batalla con bolas de nieve: no debería dejarse arrastrar a malas acciones.
Ver un muñeco de nieve: tendrá un compañero frío en el amor.
Hacer un muñeco de nieve: se quiere ser temporalmente glacial hasta el fondo del corazón.
Que uno ve: promete una bella aventura amorosa.
Que lo rodean: se pregunta a cuál entre dos personas ama más o a cuál debe dar su amor.
Que uno ve huir o desaparecer al tratar de cogerlas significa una aventura amorosa triste.
En una situación de conflicto, se busca una salida; se quiere lanzar por un nuevo camino y recomenzar de cero con nuevas ideas.
Que uno ve: en general, buen presagio.
Que uno da a luz: nuevas posibilidades de existencia van a ofrecerse.
Que uno ve durante el parto: para el hombre, separación de su mujer; para los pobres, un buen presagio; para los hombres de negocios y para los ricos, un mal presagio; para el que viaja, regreso a su país.
Que uno ve con los rasgos de un bebé: felicidad para la madre.
Que uno lleva a la fuente bautismal: signo de una vida cristiana.
Que uno ve dormir: buen porvenir.
Que uno ve jugar: alegría.
Que uno ve enfermo, caer o que le oye pelearse o gritar: recesión en los negocios.
Delgado: presagio de que los tiempos serán malos.
Gordo: los tiempos serán buenos.
Moribundo: un éxito inesperado.
Que uno asesina: se causará un gran daño a sí mismo.
Jugar con muchos niños: suerte en el amor y éxito en todo lo que emprenda.
Recibir un título de nobleza: ilusión y decepción.
Hablar con un noble: un objetivo que uno se había fijado no se alcanzará.
Símbolo de los peligros del inconsciente; alerta interior.
Oscura: tiempos agitados y difíciles en perspectiva.
Oscura, en la que uno camina: una desgracia amenaza.
En cualquier combinación, debilitamiento de las fuerzas intelectuales y físicas.
Ver una nodriza que amamanta a un bebé: un gran éxito se anuncia en la situación presente.
Vista por niños: lama noticia.
Vista por mujeres jóvenes significa gran deseo de maternidad.
Debe interpretarse como una llamada a sí mismo, como una advertencia a no perder su personalidad.
Oír su nombre: una persona querida está en apuros.
Leerlo: se es citado o conocido públicamente.
Escribirlo: advertencia de no adoptar una actitud definitiva en un asunto.
Tanto en sueños como en el lenguaje de las flores, y haciendo honor a su nombre, esta florecilla nos recuerda que lo prometido debe cumplirse; es decir, que lo que ahora sucede es la consecuencia de nuestra conducta y de nuestras promesas en el pasado.
Que uno ve: puede acceder al país de sus sueños por poco tiempo.
En la que uno monta: una bella esperanza se desvanecerá.
La incertidumbre lleva a emprender pronto algo.
Buena, que uno recibe: mala noticia.
Mala, que uno recibe: puede contar con una buena noticia.
Que le es contada a uno: llegará una carta de muy lejos.
El cielo que se oscurece significa que una situación clara se oscurece, etc.; hay que tener en cuenta la forma de la nube.
Ligera y blanca, que uno ve: horas bellas y apacibles que uno pasa soñando.
Oscura y pesada: días llenos de preocupaciones.
En las mujeres, deseo de tener un hijo; en los hombres, de fundar una familia.
Verlo en forma de cifra: en el futuro próximo tendrá suerte en todas las cosas en las que el nueve figure o juegue un papel.
El mismo significado que Que uno ve: advertencia contra una ilusión; encuentro con una persona ruda al principio, pero de buen corazón. Que uno parte: tendrá mucho trabajo. Que uno come: será recompensado por una acción valiente y enérgica. Amarga: siempre hay alguien que ríe de la desgracia de otros. Que uno encuentra vacía: decepción. Ver un nogal cubierto de nueces: hay que contar con dificultades, pero una vez superadas, el éxito valdrá la pena. Un nogal sin nueces: le esperan dificultades, obstáculos y preocupaciones.
Sueño de suerte; a menudo ha traído suerte en el juego cuando se ha tenido en cuenta.
Que uno ve: puede tener importancia en la lotería.