Dulce y tierna en apariencia solamente; símbolo del acercamiento erótico.
Que uno oye arrullar: recibirá un consejo que debe seguir de todos modos; igualmente, presagio de unión de dos personas que se aman.
Que uno ve encaramada o corriendo: conocerá a personas que gozan de mucha consideración, y entre las que será bienvenido.
A la que da de comer: hay que agradar, de una manera o de otra, a los conocidos que gozan de mucha consideración, porque será largamente recompensado.
Que uno asusta, captura, mata o come: perderá por su culpa la benevolencia de personas conocidas que gozan de mucha consideración.
Que uno ve volar: gracias a su relación con personas que gozan de mucha consideración, hará nuevos conocidos importantes.
Ver palomas acariciándose con el pico: un amorío o una amistad.
Ver muchas palomas: felicidad en el hogar.
Vendedor de palomas: un período de alegría se aproxima.