Si nos soñamos con quemaduras en el cuerpo o percibimos su dolor, lo primero que debemos hacer al despertar es comprobar la posible existencia de una inflamación o enfermedad inflamatoria tan incipiente que en estado de vigilia todavía no haya dado señales de su existencia.
De no ser así, las quemaduras siempre presagian disputas o cóleras que pueden desencadenar la pérdida de bienes o de amistades.
No olvidemos que las quemaduras son la consecuencia de un calor (FUEGO) excesivo.