Las aves, en su mejor aspecto, están vinculadas a la belleza, la alegría y el amor, o a esta cualidad trascendental que eleva al hombre por encima de la esclavitud a su ser inferior, llevándolo a la libertad expresando así su ser superior. El ave como símbolo aparece frecuentemente en la historia, en la Biblia y en los sueños de hombres y mujeres cuando atraviesan por periodos críticos de sus vidas. El mismo símbolo se manifiesta en el caso de los hechiceros de las tribus primitivas, quienes declaran su capacidad para desprenderse del cuerpo y desplazarse por los aires.

Siendo el pájaro la única criatura capaz de remontarse a grandes alturas, es dable explicarse por que ha venido siendo relacionado, desde los tiempos primitivos a los actuales, con la capacidad del hombre para elevarse por encima de lo material y el egoísmo, hasta el mundo del espíritu.

Para interpretar este símbolo en los sueños, es menester tener en consideración la clase de ave, su actividad y la relación de uno con el mismo durante el sueño.

Las aves -en especial el águila- simbolizan el centro timo del cuerpo, que tiene que ver con el amor. Un ave que salta de un lado a otro pidiendo ser alimentada, podría indicar que ese aspecto de la naturaleza del durmiente (el amor) necesita nutrición.

El azulejo: se relaciona a menudo con la felicidad y la alegría. Por lo tanto, cuando se le ve en algún sueño muy bien puede augurar circunstancias felices en relación con los demás símbolos que aparezcan en el sueño. Si el azulejo es visto en el hogar, la oficina, o en la residencia de un pariente, probablemente tiene que ver con un mejoramiento de las condiciones en esos puntos.

El periquillo de Austria: esa ave llamada “del amor” puede indicar un amor que esta enjaulado y que necesita ser puesto en libertad.

La paloma: suele ser tomada como símbolo de la paz. También se relaciona con una iniciación interior, como el descenso del Espíritu Santo. El arrullo de la paloma en un sueño, puede apuntar que es preferible la ternura a la agresión y que mas bien debemos arrullar que hablar con aspereza.

El petirrojo: es el heraldo de la primavera y puede significar un nuevo principio, una nueva oportunidad, hasta un renacer espiritual. Su tenacidad para esperar al gusanillo que le sirve de alimento, en el caso de algunas personas puede significar paciencia.

El pavo real: a pesar de su plumaje exótico, suele ser asociado al amor egoísta, de si mismo, simbolizando así la advertencia: “El orgullo precede a la destrucción”.

El cuervo: puede ser un recordatorio del amor de Dios y la preocupación de Dios por ayudar en sus problemas al hombre.

El buitre: suele asociarse a una forma de comer sin discriminación alguna.

El búho: en los sueños a menudo constituye una advertencia para que se emplee mas el criterio en algún asunto relacionado con el corazón.

El halcón: es entrenado como ave de presa. Por lo tanto podría muy bien representar la depredación hacia otros, aprovechándose de un amor, o ser victima de la depredación, todo dependiendo de los demás símbolos que se den en el sueño.

Sinsonte: este pájaro se asocia a aspectos burlones.

El fénix: pájaro este que figura en la mitología egipcia, vive quinientos años. Como se arrojo al fuego para levantarse mas tarde de las cenizas completamente renovado, suele representar la resurrección y la inmortalidad. En el sueño puede considerársele como anuncio de un renacimiento espiritual.

Ganso: se relaciona fácilmente con la expresión “tonto como un ganso”. Debido a esta asociación vulgar el ganso suele simbolizar el proceder vulgar.

El pollo: un pollo degollado puede significar futilidad histérica porque la persona no emplea su cabeza y puede decirse que “la ha perdido”. También es símbolo de timidez y falta de valor.

El cisne blanco: es una criatura de gran belleza y gracia.

El gallo: es fanfarrón y simboliza la agresividad.