Abejas y avispas: estos insectos representan las experiencias hirientes de la vida.

Escarabajos e insectos: representan disgustos o malos momentos.

Orugas y gusanos: estos animales suelen simbolizar destrucción o desintegración. Las orugas se alimentan con hojas de las plantas y pueden relacionarse a una actitud o actividad de carácter destructivo para la vida espiritual del soñante y para su salud.

Cuando en un sueño se contemplan gusanos en los alimentos, significa una advertencia contra el alimento de que se trata o el régimen alimenticio en general.

Piojos y otros bichos: simbolizan el desaseo físico, mental y espiritual.

Araña: la cual se distingue por la red que elabora para atrapar a otros insectos, suele simbolizar la trampa en la que esta precipitándose el soñante. Esto puede relacionarse a alguna indiscreción reciente, a una tentación que se avecina, a una mala costumbre o a una mala operación comercial. El escenario y los demás elementos del sueño, servirán para determinar la naturaleza precisa del aviso.

Moscas: simbolizan sentimientos de molestia hacia personas o situaciones de la vida.

Cucarachas: representan estados de irritaciones.

Escorpión: representan la dolorosa secuela de una desgraciada experiencia. En forma más sutil un escorpión que actúa con torpeza, puede llegar a herirse el mismo con su aguijón.

Mariscos: dan aviso de emplear las posibilidades creativas para embellecer el hogar y la vida de los demás.

Ranas: suelen representar todo tipo de impurezas en el ser. El croar de la rana puede representar un hablar ininteligible e imprudente.

Pesca y peces: con frecuencia se relacionan al aspecto espiritual de la vida. El acto de pescar, simboliza los propósitos espirituales de la vida y la búsqueda del hombre hacia una conciencia mas elevada. Cuando se sueña que se pesca un hermoso y voluminoso pez, se trata del desarrollo del yo divino.

Un pez feo, como el pez gato cuya carne carece de sustancia puede implicar una cierta debilidad espiritual.